Un año más, la segunda semana de noviembre estaba marcado en el calendario para celebrar una de las carreras más populares, la Behobia - San Sebastian. Esta vez, por diferentes motivos, la carrera ha sido más especial respecto a ediciones anteriores. Por un lado porque la prueba celebraba 50 ediciones, por otro lado el cambio de recorrido, volviendo al trazado de los primeros años. Pero sobre todo, lo he vivido de una manera especial por lo cerca que he tenido de perdérmela.
Dos días antes de la prueba, camino al aeropuerto perdí la documentación, dándome cuenta de ello en la cola de embarque. Fueron momentos duros: rabia, frustración, impotencia y sobre todo la incertidumbre de saber si podría volver a casa a tiempo para la carrera. El sábado por la mañana, me presenté en el consulado para pedir un salvoconducto y así poder comprar un nuevo billete de avión. Esta vez la suerte estuvo de mi lado y autorizaron el documento antes de que cerrasen las oficinas. El sábado a media noche llegaba a Irún cansado pero con más ganas que nunca de BSS.
Llegó el día de la carrera, a las 07:00 arriba junto a mi invitado asturiano Jose Miguel, un buen desayuno y sin perder tiempo nos juntamos con los del equipo para ir a dejar las mochilas y los coches a San Sebastian para el lunch de después de la carrera. De vuelta a Irún, concentración en la sede del equipo, "el batzoki", para estirar un poco y sacar unas fotos. 09:40 salimos trotando hacia Behobia, por el camino coincido con un par de amigos, Larzabal y Iulen, qué alegría verlos. Vemos el ambiente en el barrio de Behobia y varios del equipo nos dirigimos a la salida, este año medio kilómetro más adelantada de lo habitual.
A pesar tener dorsal morado con hora de salida a las 10:01, decido salir a las 10:10 con alguno más del equipo en el grupo de dorsal rojo. Este año no había preparado mucho la carrera y después de los nervios que había pasado para poder venir, lo único que se me pasaba por la cabeza era disfrutar como si fuese la primera vez que iba a correr la BSS. Los primeros kilómetros se pasaron sin darme cuenta, saludando a la gente conocida que estaba animando por las calles de Irún y en compañía de Carlos hasta el km10.
Viendo que podía sufrir un poco más, la segunda parte apreté el ritmo y comencé mi carrera en solitario. Fui adelantando corredores mientras disfrutaba kilómetro a kilómetro del nuevo recorrido que pasaba por Errentería y Pasaia. Empecé a sufrir un poco en la siempre exigente subida al alto de Miracruz, pero una vez arriba con el apoyo del público que nunca falta a la cita, los últimos 3km fui en volandas hasta el la línea de meta situada en el Boulevard. Una BSS más al bolsillo, esta vez compartida con 30.000 corredores. Felicitar a mi primo Borja que me ganó por unos segundos saliendo con dorsal blanco. Para terminar, nuestro particular tercer tiempo en el Parking del hotel Maria Cristina: tortilla, jamón, cervezas, sidra... En definitiva, ¡una Behobia de 10!
Resultados:
Tiempo: 1´23´´35
Participantes: 26.655
Posición: 1.824
Parciales: km5: 22:03; km10: 44:05; km15: 1:03:46
Posición: 1.824
Parciales: km5: 22:03; km10: 44:05; km15: 1:03:46